
Casos de uso de la inteligencia artificial al comercio electrónico: personalización, eficiencia y mejora del proceso de compra online
Reportaje publicado por la revista Andalucía Económica (Nº 377, octubre 2024, pág. 66)
La facturación de las plataformas de comercio electrónico en nuestro país continúa registrando cifras mayores cada ejercicio. En España, en 2023 el e-commerce superó los 84.000 millones de euros en ventas; un 16,3 % más que el ejercicio anterior. Entre los tres sectores más activos en cuanto a volumen de negocio se encuentran, por este orden: agencias de viajes y operadores turísticos, prendas de vestir y transporte aéreo. No menos cierto es que más de la mitad del mercado del comercio electrónico mundial está en manos de unas cuantas empresas. Nos encontramos pues en un escenario de bonanza y crecimiento que, al mismo tiempo, se concentra en un reducido número de compañías.
¿Qué pueden hacer las pequeñas y medianas empresas para beneficiarse del auge de esta tendencia al alza sin contar con los recursos económicos de estos gigantes tecnológicos? Una vez más, la misma tecnología parece ser la clave. Y aquí entra en juego la inteligencia artificial. La IA no es nueva, pero sí el interés generalizado por ella. Y con ello, su apertura y democratización.
Aplicaciones de la IA al comercio electrónico para pequeñas y medianas empresas
En este escenario, la tecnológica BusinessGo se encuentra inmersa en un proyecto de investigación y desarrollo para la aplicación de inteligencia artificial a la venta online y a la generación de oportunidades de negocio en el ámbito digital. Bajo el paraguas del programa MIDAS, BusinessGo trabaja en el desarrollo de funcionalidades de inteligencia artificial accesibles para empresas pequeñas y medianas. Y todo ello en el ámbito del marketing 5.0, que persigue ofrecer una experiencia de marketing más humana y personalizada.
Algunas de las máximas de este proyecto consisten en aplicar la inteligencia artificial para ayudar a las empresas a entender mejor su modelo negocio y mejorar sus productos en base al conocimiento de sus competidores, del mercado y de su público objetivo, permitiendo así mejorar su oferta competitiva y dirigiendo al consumidor mensajes más adecuados a su necesidad. Derivando todo ello en un aumento de su facturación y su volumen de negocio.
La inteligencia artificial ayuda a las empresas a entender mejor su modelo negocio y mejorar su productos en base al conocimiento de sus competidores, del mercado y de su público objetivo.
No menos importante es la contribución a la mejora de la atención al cliente y del propio proceso de compra, venta y posventa. Aplicaciones como chatbots, contenidos dinámicos y personalización automatizada de mensajes son algunos ejemplos. Sin olvidar la participación de la IA en la propia generación y mejora de los mensajes, gracias a las posibilidades de la IA generativa.
En definitiva, se abre un abanico de posibilidades nuevas y atrayentes para todas aquellas empresas que apuesten por la inteligencia artificial, que requiere como necesario que las compañías capaciten a su personal e inviertan en tecnología para sumarse al crecimiento imparable del comercio electrónico.